Los Robles Gerhoteles Madrid busca constantemente ofrecer terapias nuevas y talleres innovadores que promuevan una vida más independiente y saludable. Entre las últimas en incorporarse, las terapias con animales, con muñecas y un taller de jardinería. Todo ello, sin olvidar su programación habitual en la que los residentes asisten diariamente a terapia ocupacional, clases de Taichí (impartida por la Asociación de Parkinson de Madrid), talleres intergeneracionales, conferencias sobre temas de interés, salidas y excursiones culturales y conciertos de música clásica, entre otros.
Respecto a las nuevas terapias, la Actividad Asistida con Perros (AAP) consiste en una modalidad de interacción que crea un vínculo entre una persona y un animal. Gracias a la asociación Menudo Peludo, que trabaja con el potencial innato del perro para mejorar la capacidad de los mayores en el ámbito social, se ha conseguido obtener beneficios emocionales para los residentes, enriquecer y reforzar las actividades, además de contribuir al bienestar general. Igualmente, ayuda a mejorar la coordinación de movimientos, además de su motricidad, y refuerza la comunicación y ejercita la memoria. Y a nivel personal, aumenta la autoestima y ayuda a salir de su aislamiento al participante. En los Robles Madrid, este taller tiene lugar todos los martes por la tarde, y aunque puede asistir cualquier residente, está especialmente pensado para aquellos que padezcan una enfermedad neurodegenerativa como puede ser el alzheimer.
Terapia con muñecas: menos ansiedad y agitación
Por otra parte, y con finalidades muy parecidas a las descritas en el taller anterior, la terapia con muñecas está dirigida especialmente a personas con deterioro cognitivo. El objetivo es reducir la ansiedad y la agitación para ayudar a controlar trastornos emocionales y de conducta. Aunque pueda resultar algo chocante, existen numerosos estudios científicos que evidencian lo beneficioso de este tipo de terapias y así lo está comprobando Cristina García, la terapeuta del Centro, que indica que resulta idóneo para “conductas disruptivas como son las alteraciones del ánimo, trastorno de agitación o desorientación. Supone tener la mente ocupada y hacerse responsable de lo que ellos atienden como si fuera un bebé”. Antes de utilizar esta terapia, desde Los Robles se consulta siempre con los familiares.
En cuanto al taller de jardín, se ha instalado en la terraza exterior un huerto urbano en el que se han plantado diferentes plantas aromáticas (romero, hierbabuena, lavanda, tomillo…) para que los residentes más autónomos puedan trabajar la estimulación sensorial, además de la responsabilidad de mantenerlo en las mejores condiciones.
Mayor flexibilidad para los socios del Club Social Los Robles
Casi una década de actividad respalda la aceptación del Club Social Los Robles, puesto en marcha pensando en aquellos mutualistas que quieren una mayor calidad de vida, fomentar el envejecimiento activo y retrasar el deterioro propio de la edad. Para ello, el Centro ofrece multitud de actividades y servicios (fisioterapia, terapias cognitivas, conferencias, excursiones, entre otros) en un horario diurno para que los socios puedan ir a dormir a su hogar y no perder los vínculos familiares. Dando un paso más allá, el Club se adapta a la demanda de los residentes, y, a partir de ahora, permite la posibilidad de asistir únicamente a las actividades y/o servicios que el interesado desee, adaptando los precios a las necesidades. “Nuestra idea es dejar plena libertad a los asiduos al Club y que no tengan que estar todo el horario completo en la residencia, sino que puedan asistir a una conferencia, hacer comida y merienda o recibir fisioterapia o podología y volver a su casa”, comenta Natalia Díaz, directora de Los Robles Madrid.
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