Llevar una dieta equilibrada y mantener un peso adecuado es posible siguiendo estos consejos sencillos y prácticos que ayudarán a conseguirlo. Los alimentos no son malos o buenos, son las dietas las que pueden ser adecuadas o inadecuadas. La alimentación debe ser variada para poder gozar de una perfecta salud. No hay que descuidar el practicar ejercicio para evitar el sobrepeso y mejorar, por tanto, la circulación sanguínea y la elasticidad de las articulaciones.
Consejos prácticos para una dieta equilibrada
- Tanto si se come en casa como fuera de ella, las comidas más importantes diarias deben ser tres: desayuno, comida y cena. Hay que mantener una hora fija y no saltarse ninguna comida. Si esto sucede, el organismo almacenará todas las grasas posibles en el próximo refrigerio para suplir la falta de energía.
- A media mañana y a media tarde es el momento de tomar una fruta, un yogur, una porción de queso desnatado o un smoothie. Nada de picar dulces, alimentos grasos o barritas energéticas llenas de azúcar.
- Hay que comer en pequeñas porciones, lentamente y masticando bien para asimilar los nutrientes y aumentar el efecto de saciedad que evitará el comer más de la cuenta, permitiendo disfrutar de una digestión ligera.
- Debe priorizarse la cocción, al vapor o a la plancha, utilizando especias o hierbas aromáticas y eliminando al máximo las grasas. Emplear una sal baja en sodio asegura un aporte justo de esta, traduciéndose en una buena regulación de la tensión y en la no retención de líquidos.
- La mayoría de personas no come la suficiente cantidad de verduras, legumbres y frutas, que son las que proporcionan la mayor parte de las vitaminas y minerales que se necesitan diariamente y ayudan a mantener el peso ideal.
- El sobrepeso supone un aumento potencial de sufrir enfermedades cardiovasculares y diabetes. Un exceso de peso es consecuencia de un aporte calórico superior a las necesidades diarias del organismo. Por eso, se deben elegir los productos frescos de temporada a los platos precocinados que contienen exceso de sodio, azúcar y grasa. No ir a comprar nunca con el estómago vacío evitará la tentación de adquirir productos perjudiciales.
- Las sopas, tanto frías como calientes, tienen grandes ventajas a la hora de ayudar a mantener una alimentación equilibrada y un peso regulado, ya que son ricas en vitaminas y bajas en calorías.
- El pescado azul no debe faltar en ninguna mesa, por lo menos hay que comerlo dos veces por semana. Su riqueza en Omega 3, vitaminas y proteínas protege tanto al corazón como a las articulaciones, evitando además la oxidación de las células.
Es necesario adoptar una dieta equilibrada, modificando progresivamente los malos hábitos alimentarios que, a la larga, perjudican la salud, son la causa del sobrepeso y propician muchas enfermedades.
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