Ahora es el momento de llenar el depósito, con el precio del gasóleo por debajo del euro por litro y en torno a 1,12 euros/litro, para la gasolina. No había precios tan bajos desde 2010. Sin embargo, no hay que perder las buenas costumbres. Optimizar la manera de conducir, para obtener ahorro en el combustible y proteger el medio ambiente, son algunas de las pequeñas acciones para mejorar la economía doméstica. A continuación, se recuerdan algunos de los trucos para realizar una conducción eficiente y sacar el máximo rendimiento a los depósitos.
Consejos de ahorro
- Una marcha adecuada: llevar una velocidad uniforme y utilizar la caja de cambios correctamente (para no revolucionar el motor) son principios básicos, de cara a ahorrar combustible.
- Evitar los acelerones: además de los grandes consumo y desperdicio de combustible, revolucionar más de la cuenta el motor tiene serias consecuencias para la junta de culata y las bielas. Aparte, no suelen tener reparaciones baratas.
- Utilizar el freno motor: además de la gasolina, las pastillas de freno son elementos que también cuentan en una conducción eficiente. No abusar de los frenos, sino detener o reducir marcha a partir del freno motor, es una gran ventaja, para prolongar la vida del vehículo al máximo.
- Las ventanillas abiertas gastan más gasolina: el aire entra en el interior del vehículo y ofrece mayor resistencia. El coche necesitará más potencia, para continuar a la velocidad deseada, lo que, únicamente, se consigue pisando más el acelerador, es decir, gastando más combustible.
- Los neumáticos deben estar a pleno rendimiento. Estos elementos son responsables del 20 % del consumo de combustible de un vehículo. Es necesario asegurarse de que el dibujo no esté desgastado y la presión sea la adecuada para cada rueda.
Estos pequeños trucos marcarán la diferencia y harán que la conducción sea 100 % eficiente y el ahorro esté asegurado.
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