Con un retiro clarificado gracias a la pensión, seguro o fondo de pensiones, y lo que muchos consideran los mejores años de nuestra vida por delante, las opciones que se nos abren son más de lo que nos puede parecer en un principio. ¿Por qué permanecer en el mismo lugar de toda la vida? ¿Por qué no buscar un lugar que nos guste de verdad y donde podamos vivir mejor y donde nuestra pensión valga más? Millones de pensionistas a lo largo del planeta se han planteado esta pregunta y han terminado por hacer sus maletas e irse a otro lugar.
Un pensionista español tiene bastantes opciones. En primer lugar, está España. Las islas o ciudades más pequeñas y agradables en otras provincias, pueblos de la infancia… pero los más aventureros o aquellos cansados de España tienen opciones en pequeños pueblos italianos, en Latinoamérica o incluso en el sudeste asiático. Lugares en los que entre 400€ y 600€ mensuales sirven para llevar una vida agradable.
Si estamos contemplando retirarnos a otro lugar, hay al menos tres pasos esenciales a dar antes de deshacernos de todo y coger el avión:
- Estudiar el coste de la vida: Más que centrarnos en la tasa de cambio del euro, estudiar el precio de los alquileres y la comida nos dará una idea más clara sobre el presupuesto mensual que obsesionarnos con la moneda local. A fin de cuentas, este será probablemente el mayor gasto mensual del que tengamos que hacernos cargo.
- Hacer varias visitas exploratorias: Antes de elegir el lugar al que iremos, sobre todo, a descansar y ser todo lo felices que podamos, tenemos que estar seguros de que es el lugar adecuado. Pasear por la zona, estar a gusto con los habitantes del lugar o disfrutar del clima y la oferta cultural serán parte de nuestra vida cotidiana y es necesario que nos guste. Durante estas visitas también podremos hacer contactos y conocer nuevas personas que nos podrán ayudar a instalarnos y con las que relacionarnos más adelante.
- Comprobar la cobertura médica: A medida que envejezcamos es probable que necesitemos más cuidados médicos. La disponibilidad de buenos profesionales de la medicina a poca distancia de nuestro futuro hogar o de fácil acceso es algo que siempre tenemos que tener en cuenta a la hora de elegir nuestra futura residencia.
Quedan varias preguntas por responder, como nuestra disposición a aprender los rudimentos de un nuevo idioma, conocer una nueva cultura o el tipo de clima que buscamos. Pero lo esencial es encontrar ese lugar en el que sabemos que queremos pasar el resto de nuestros días.
Vía | AzStarnet
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