El cuidado de la naturaleza es un compromiso de todos, y es por ello que el sector asegurador no se encuentra ajeno a la causa. Con motivo del Día Mundial de Protección de la Naturaleza, repasamos qué hace el seguro para proteger y cuidar de la naturaleza.
Se dice que la biodiversidad es el ‘seguro de vida’ para salvar el planeta, y preservar el entorno natural es responsabilidad de toda la población y todos los sectores laborales que se encuentran presentes en la tierra. El Día Mundial de Protección de la Naturaleza supone una oportunidad más de sensibilización con vistas al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 (ODS). Estos Objetivos forman parte de las estrategias del conjunto del planeta y se centran, principalmente, en la lucha contra el cambio climático, la desigualdad, la promoción de la innovación o el consumo sostenible. La filosofía del seguro es proteger y el seguro también entra en juego en la protección de la naturaleza.
Aunque a primera instancia puedas llegar a pensar que el seguro no tiene nada que ver con los ODS y la sostenibilidad, este sector se encuentra presente en la protección de todas y cada una de las actividades que se realizan, procesos de producción, o consumo, tal y como indica Estamos Seguros. El seguro forma parte de la gestión de los riesgos que deben afrontar las empresas, así como la financiación necesaria para potenciar proyectos verdes y sostenibles.
De acuerdo con los 17 Principios para la Sostenibilidad en Seguros (PSI) compartidos por UNESPA, resumimos aquellos que trabajan por cuidar y proteger la naturaleza y el medioambiente:
- En cuanto al sexto ODS sobre la promoción de un agua limpia y saneamiento, tal y como indica UNESPA, el seguro entra en escena a la hora de exigir un “tratamiento eficaz y adecuado” del agua en las pólizas de edificación.
- De acuerdo con el séptimo ODS sobre energía asequible y no contaminante, UNESPA reitera el papel del seguro en la promoción de eficiencia energética y la mejora de la habitabilidad de las viviendas.
- En lo referente a la consecución de ciudades y comunidades sostenibles, el ODS número once, el seguro español garantiza el mantenimiento y renovación de las más de 20 millones de viviendas y comunidades que protege.
- Tal y como indica UNESPA y Estamos Seguros, 8 de cada 10 aseguradoras controlan su consumo de energía, así como el consumo de agua en un 65%, y la mitad de ellas mide su huella de carbón, de acuerdo con el ODS número doce en lo referente a la producción y consumo responsables.
- Por último, en cuanto a los ODS 13, 14 Y 15 que hacen referencia a la acción por el clima, el cuidado de la vida submarina y los ecosistemas terrestres, a través del seguro medioambiental, el sector asegurador es capaz de ofrecer herramientas de prevención y reparación del medio natural. Igualmente, los seguros agrarios suponen un instrumento para garantizar la sostenibilidad de los campos.
Inversiones sostenibles, un reclamo cada vez más necesario
No podíamos tratar el papel del seguro como protector de la naturaleza y el medioambiente sin antes mencionar el auge de las inversiones responsables con el medioambiente. Comúnmente conocidas como inversiones ESG o ASG, se trata de inversiones basadas en factores y consideraciones que tengan un impacto positivo a nivel medioambiental. Según indican desde Estamos Seguros, el seguro colabora con terceros para impulsar acciones sostenibles, e invierte en estos tipos de activos, ya sea mediante la compra de activos verdes, o mediante la renuncia a la adquisición de activos relacionados a políticas incompatibles con los objetivos ESG. Lejos de figurarse como factores secundarios o alternativos, las inversiones ESG están adquiriendo cada vez más protagonismo, hasta el punto que el 54% de los planes de pensiones europeos tiene en cuenta el cambio climático en sus carteras.
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